El Papa Francisco inaugura una escultura que recuerda el desafío
evangélico de la acogida
La inspiración detrás de la obra está tomada de un
pasaje bíblico: «No se olviden de practicar la hospitalidad, ya que gracias a
ella, algunos, sin saberlo, hospedaron a los ángeles». Hebreos 13:2
Griselda Mutual – Ciudad del Vaticano
“Angels Unawares” es una escultura de bronce de
tamaño natural que representa a un grupo de migrantes y refugiados de
diferentes orígenes culturales y raciales y de diversos períodos históricos.
Ellos están juntos, hombro con hombro, acurrucados en una balsa. Dentro de esta
diversa multitud de personas, las alas de un ángel emergen del centro,
sugiriendo la presencia de lo sagrado entre ellos.
El desafío evangélico de la acogida
En la conclusión de la Santa Misa en la Plaza de
San Pedro con motivo de la 105ª Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado, y
antes de rezar la oración del Ángelus, el Papa Francisco selló el compromiso
que tenemos los cristianos de practicar la hospitalidad inaugurando esta obra
del escultor Timothy Schmalz, inspirada en las palabras de la Carta a los
Hebreos: «No se olviden de practicar la hospitalidad, ya que gracias a ella,
algunos, sin saberlo, hospedaron a los ángeles».
Esta escultura de bronce y arcilla representa a un
grupo de migrantes de varias culturas y diferentes períodos históricos. Quería
esta obra de arte aquí en la Plaza de San Pedro para que recordara a todos el
desafío evangélico de la acogida.
Es necesario que nadie se sienta
excluido
El Santo Padre además saludó a todos los que
participaron en este momento de oración con el que se ha renovado, como el
mismo dijo, “la preocupación de la Iglesia por las diversas
categorías de personas vulnerables en movimiento”.
En unión con los fieles de todas las diócesis del
mundo, hemos celebrado la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado, para
reafirmar la necesidad de que nadie sea excluido de la sociedad, ya sea un
ciudadano residente de larga data o un recién llegado.
El Papa pide rezar por Camerún
Por otra parte, el Papa Francisco recordó que
mañana, lunes 30 de septiembre, se abrirá en Camerún un encuentro de diálogo
nacional para la búsqueda de una solución a la difícil crisis que aflige al
país desde hace años.
Sintiéndome cercano a los sufrimientos y esperanzas
del amado pueblo camerunés, invito a todos a orar para que este diálogo sea
fructífero y conduzca a soluciones de paz, justas y duraderas, en beneficio de
todos.
“Que María, Reina de la Paz, interceda por
nosotros”, finalizó.